Fracaso en Catalunya para Ciudadanos

Molly Antigone Hall

Ciudadanos parece haberse estancado en Catalunya. Ha repetido el resultado electoral de las elecciones de 2016: cinco diputados. Sólo tiene por detrás al PP y a Vox, con un diputado cada uno. En el resto de España la situación ha sido muy diferente, porque en votos ha alcanzado prácticamente al PP. Ha aumentado notablemente el número de escaños (25 más) y  se sitúa con 57 escaños como tercera fuerza, ya muy cerca del PP.

La valoración en Barcelona, en el Hotel Melià, ha quedado muy deslucida y la celebración se ha concentrado en Madrid, donde estaba la candidata por Barcelona, Inés Arrimadas. El secretario general José Manuel Villegas aprovechó la ocasión para denunciar lo ocurrido cuando Inés Arrimadas fue a votar a la escuela Ausiàs March en el barrio de Les Corts. Tras depositar su voto en la urna, la presidenta de la mesa le negó la mano en dos ocasiones a la candidata jerezana, dejándola con la mano suspendida en el aire. “Esto es lo que tenemos que aguantar los constitucionalistas en Catalunya: la Presidenta de la mesa electoral del colegio en el que he votado se niega a darme la mano por mis ideas”, escribió Arrimadas después en su perfil de Twitter.

Hace apenas 17 días que Arrimadas y sus seguidores celebraron en este mismo hotel, Melià, la colgada de los carteles y el inicio de la campaña electoral. Esa noche de sonrisas radiantes y gritos de “¡vamos!” tiene poco que ver con el ambiente tranquilo y silencioso de esta noche. En la terraza del hotel se ha instalado una pequeña plataforma con el corazón de Ciudadanos, que incluye las banderas de España, Catalunya y la Unión Europea.

El fracaso del proyecto de Ciudadanos en Catalunya se ha vivido tímidamente, y completamente apartado de los medios de comunicación. Un pequeño grupo de seguidores han mirado atentamente las pantallas con cara de preocupación, vitoreando y aplaudiendo cada vez que se ha anunciado un resultado favorable. Fuera, se han apagado las luces y los guardias de seguridad han sugerido a los periodistas entrar al hotel a cenar.